Os compartimos la experiencia directa de una participante del curso de formación “Earth & Heart Training in Lübnitz, Germany” que se desarrolló en Lübnitz, Alemania del 10 al 24 de julio de 2023.
En el curso, subvencionado por el programa Erasmus+, participaron jóvenes de 7 países, entre ellos España. La Red Ibérica de Ecoaldeas actuó cómo organización de apoyo enviando a jóvenes participantes a este encuentro inspirador.
Aquí va el testimonio:
Viajé en tren de Berlín a Bad Belzig, y en la estación ya conocí a otros mochileros que se dirigían a la misma dirección: la “comunidad de casas diminutas” del pueblo de Lübnitz.
Lübnitz es un pueblo con mucho ambiente, lleno de hermosa naturaleza y edificios antiguos, y hay una pequeña cafetería que los habitantes del pueblo gestionan juntos.
Al otro lado de la calle encontramos la siguiente comunidad, con sus propios campos y piscina, y otra ecoaldea más grande, llamada Zegg, a un trayecto en autobús. Visitamos ambas comunidades y así obtuvimos una perspectiva de cómo pueden ser las distintas comunidades.
La formación de Earth & Heart” contó con participantes de 7 países europeos diferentes: Serbia, Alemania, Eslovenia, Francia, España, Finlandia e Italia. Fue divertido aprender nuevas palabras en nuevos idiomas y hacer reír a los demás con las peculiaridades de la lengua finlandesa.
El primer día aterrizamos y nos conocimos casualmente. El grupo se unió enseguida y fuimos una pequeña familia durante las dos semanas siguientes. Fue una experiencia realmente hermosa e importante para mí, y sentí que nuestra pequeña comunidad era realmente segura, cariñosa y solidaria cuando cada persona (incluida yo) atravesaba sus propias sombras y desafíos durante la formación.
Pero ¡eso es lo que hemos venido a hacer! Lo que nos unió a todos fue que sentíamos la necesidad de desarrollar y trabajar el liderazgo, la facilitación y el empoderamiento, que sin duda también incluye las emociones, las relaciones, los límites, la comunicación y la conexión con nosotros mismos, la naturaleza y otras personas. Estos temas se exploraron durante dos semanas en forma de diversos métodos de aprendizaje no formales, conferencias, talleres, ejercicios y debates.
Algunos días nos centramos más en tareas “prácticas”. Esto significaba que estábamos fuera y trabajando con nuestras manos y con la tierra mientras explorábamos diferentes estilos de liderazgo. También fue un momento de integración muy necesario, porque entonces podías centrarte plenamente en el trabajo físico, y los procesos que se arremolinaban en tu cabeza desaparecían temporalmente.
Había tanta gente, idiomas y culturas nuevas que me emocioné mucho cuando me di cuenta de que también había una pequeña sauna en la zona. Uno de mis mejores momentos fue hacer un par de “látigos de abedul” para la sauna. Se llama “vihta” y es una especie de escoba tradicional finlandesa con la que se azota el cuerpo para mejorar la circulación sanguínea. También disfruté enseñando y cantando canciones finlandesas para la sauna, ya que pasábamos juntos una tarde en la sauna y nos relajábamos alrededor de la hoguera.
Aprendí mucho tanto de los temas programados como fuera de ellos. El grupo era muy abierto y quería compartir sus conocimientos en las sesiones de “espacio abierto”, y gracias a ello aprendí las dos cosas más importantes de esta formación: IFS (método de los sistemas familiares internos) y el teatro de improvisación. Además de esto, creo que el drive de documentos, que se creó para recopilar todos los materiales que aprendimos en la formación, es un gran recurso. Allí puedes encontrar literatura, vídeos, formaciones y otras cosas útiles relacionadas con estos temas.
Me di cuenta de la cantidad de información que hay disponible si se sabe buscar. Hay tantos métodos diferentes que se pueden utilizar para superar las tormentas emocionales y los retos de la vida, y todo el mundo puede encontrar el que más le convenga.
Además, durante la formación conocí a gente absolutamente maravillosa e inspiradora, y parece que ahora el mundo es un poco más abierto. He oído hablar de ecoaldeas y proyectos de voluntariado en Europa que se pueden visitar, y he hecho muchos amigos nuevos a los que saludar en futuros viajes a Europa.
Gracias de corazón a los facilitadores de este programa y a Erasmus+ por financiar esta gran oportunidad y esta experiencia enriquecedora.
Continúo mi vida más íntegra, consciente, inspirada, abierta y feliz sabiendo que en todos los rincones del mundo se pueden encontrar personas maravillosas y proyectos interesantes. Y estos proyectos son una oportunidad perfecta para crear conexiones, aprender cosas nuevas y dar pasos adelante en tu propio camino, donde quiera que te lleve.
¡Kiitos!
Liselott Österman
Participante finlandesa